El desierto, tal vez tú lo conoces bien. Los israelitas ciertamente lo conocieron. Después de todo, pasaron cuarenta años vagando por el desierto. Las victorias eran pocas. El progreso era lento. Estaban libres del Faraón, pero no libres del temor. Hoy Dios tiene una victoria para que la reclames.
Precio: $
Adquiéralo aquí